Los ayuntamientos de la comarca de Sahagún se unen para denunciar el “abandono sanitario” de la Junta
Cansados de una situación de “total precariedad”, los ayuntamientos adscritos a la Zona Básica de Salud (ZBS) de Sahagún han sellado una carta conjunta dirigida a las autoridades sanitarias de la Junta de Castilla y León con un mensaje claro y contundente: la comarca vive un “riesgo sanitario” continuado y se sienten “abandonados” por una gestión que, denuncian, incumple los derechos de sus vecinos a una atención de calidad, especialmente en un territorio rural, envejecido y disperso.
La misiva, rubricada por todos los ayuntamientos de la comarca sanitaria de Sahagún, centros escolares y residenciales, destapa la cruda realidad que afrontan a diario y que, de cara al verano, se agudiza con la llegada de más residentes y la incapacidad de la Administración de ‘ordenar’ las vacaciones.
La Zona Básica de Salud de Sahagún incluye 15 municipios del sureste leonés: Bercianos del Real Camino, Calzada del Coto, Castrotierra de Valmadrigal, Cea, Escobar de Campos, Gordaliza del Pino, Grajal de Campos, Joarilla de las Matas, Sahagún, Santa María del Monte de Cea, Vallecillo, Villamartín de Don Sancho, Villamol, Villaselán y Villazanzo de Valderaduey.
En los documentos se habla así de recortes en la Atención Primaria que se arrastran desde antes de la pandemia y que la situación actual no ha hecho más que agravar. Muchos consultorios locales han cerrado sus puertas, forzando a los habitantes, a menudo personas mayores sin medios de transporte adecuados, a desplazarse con enormes dificultades.
El corazón del problema radica en la insuficiente plantilla de profesionales: la ZBS opera con apenas cinco médicos de Atención Primaria. Esta escasez deja a localidades como Villamartín de Don Sancho y Grajal-Sahagún sin médico fijo, y no es raro ver a un solo facultativo intentando cubrir el Centro de Salud de Sahagún y las urgencias matutinas, con esperas interminables para los pacientes.
Los firmantes resaltan la vulnerabilidad de su población, con dos residencias de mayores y municipios a gran distancia del hospital. La ausencia de un médico o su desplazamiento a una urgencia puede significar una espera crítica para quienes necesitan atención inmediata. La Pediatría no es una excepción a esta precariedad: el servicio, ya de por sí limitado, carece de un profesional estable, lo que imposibilita un seguimiento adecuado de los menores y ha derivado en diagnósticos tardíos con consecuencias graves. La logística para acceder a medicamentos urgentes también se ha complicado, con cambios en las farmacias de guardia que obligan a los vecinos a cruzar a otra provincia en plena noche.
Peticiones
Frente a esta situación, responsables políticos, educativos y sociosanitarios exigen una batería medidas urgentes: cubrir las plazas médicas vacantes tanto en Atención Primaria como los necesarios médicos de Área para garantizar las guardias y permisos. Piden que se mantengan y refuercen los consultorios locales, que son el primer punto de contacto para muchos y cuya dotación cae sobre los hombros de las administraciones locales. Es crucial, añaden, que se dote de un pediatra estable y una enfermera de Pediatría. Finalmente, solicitan una reunión inmediata con la Gerencia Provincial para que se aborde la crisis de forma conjunta y se busquen soluciones que devuelvan la dignidad a la atención sanitaria en la comarca.
La petición se eleva ante el Defensor del Usuario del Sistema de Salud de Castilla y León, la Coordinadora del Centro de Salud de Sahagún, la Gerencia Territorial de Sanidad y Bienestar Social de León, la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León, el Procurador del Común de Castilla y León y la Subdelegación del Gobierno en León.
